Desplazados por el clima
Los desplazados climáticos se ven obligados a huir dentro de sus propios países debido a catástrofes y peligros relacionados con el cambio climático. En el 2019 hubo casi 25 millones de refugiados climáticos en el mundo.
Este año, el Informe Mundial sobre Desplazamiento Interno (GRID, por sus siglas en inglés) reveló que en 2019 hubo 24.9 millones de personas desplazadas en 140 países y territorios por inundaciones, huracanes y tormentas, agravados por el cambio climático. Los riesgos de desplazamiento por desastres naturales se han duplicado desde 1970 y la cantidad de desplazados por razones climáticas es tres veces más la cantidad de personas desplazadas a causa de conflictos y violencia.
El continente africano sintió los ciclones más fuertes de su historia: Idai y Kenneth azotaron con vientos de 220 km/hr forzando a gente en Mozambique, Malawi, Madagascar, Zimbabue y los archipiélagos de las Comoras y Mayotte a dejar sus hogares. En el Caribe, el impacto del huracán Dorian en las Bahamas también sin precedentes, además de dejar miles de desplazados en la isla, forzó desplazamientos en Estados Unidos y Canadá.
En 2019 hubo 24.9 millones de personas desplazadas en 140 países y territorios por inundaciones, huracanes y tormentas, agravados por el cambio climático.
En Argentina las inundaciones provocaron el desplazamiento de más de 23 mil personas, donde las provincia del Chaco, Corrientes, Entre Ríos, Santa Fe, Santiago del Estero y Tucumán fueron las más afectadas. Aunque la mayoría de los desplazamiento se produjo gracias a acciones gubernamentales de evacuaciones preventivas, reduciendo el número de muertes, en muchas ocasiones los desastres naturales impactan en comunidades vulnerables con poca capacidad de recuperarse.
Por otro lado el informe del Banco Mundial Groundswell de 2018 predijo que si no se toma alguna acción para el 2050 habrá más de 143 millones de desplazados climáticos internos en 3 grandes regiones: Latinoamérica, Sudeste asiático, y África. Las poblaciones más vulnerables se verán forzadas a migrar debido al impacto del cambio climático: baja de productividad agrícola, la escasez de agua, aumento del nivel del mar y de las temperaturas, además de otros factores como la deforestación y la destrucción de los bosques nativos debido al avance de la frontera agropecuaria, afirma ACNUR. La buena noticia: si actuamos ahora podríamos reducir el número de desplazados climáticos dentro de países por un 80%.
Pero el calentamiento global, no solo causa desplazamientos internos, sino también migraciones internacionales. En julio 2020 The New York Times y ProPublica con el apoyo del Pulitzer Center, modelaron por primera vez cómo los refugiados climáticos se moverán a través de fronteras internacionales. Definieron que las franjas fértiles del planeta, con un rango de temperaturas corto que permiten una producción agrícola favorable, serán desplazadas hacia el norte, por ende la migración de Centroamérica hacia el norte por motivos climáticos será de 30 millones de personas, en los próximos 30 años.
Inundaciones, sequÍas, bancarrota y hambre, será el ciclo mortal que tendrán que enfrentar ciertas regiones y cuando la tierra no responda, millones de personas tendrán que elegir entre irse o morir. Además, definen que para 2070 las zonas más calientes del planeta como hoy es el Sahara, que actualmente representan un 1 % de de zonas invivibles del planeta, pasarán a constituir un 19% de la tierra.
Inundaciones, sequÍas, bancarrota y hambre, será el ciclo mortal que tendrán que enfrentar ciertas regiones, y cuando la tierra no responda, millones de personas tendrán que elegir entre irse o morir.
Algunas soluciones planteadas por los distintos informes mencionados son: reducir gases de efecto invernadero, incluir migración climática en los planes de desarrollo e invertir en el entendimiento de la migración climática que a su vez permita una mayor integración de poblaciones migrantes a países destinatarios.
La crisis climática no es una de las principales causas de la migración mundial, sin embargo es uno de los principales agravantes y su huella existe en las grandes oleadas migratorias. La adaptación mas natural y fundamental al cambio climático es la migración, donde la movilidad será resiliencia.
Foto principal: Propiedad de Meridith Kohut para The New York Times Magazine
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